Columna de Ambar Cayupan Bustamante : El rol de la mujer mapuche en la sociedad actual

En el marco de la conmemoración del día internacional de la mujer indígena, se me planteo la tarea de definir cuál es el rol que debieran tener las mujeres mapuche en la sociedad actual. Cuestión sumamente complicada, porque no tenemos ni vamos a tener una sola respuesta a esta interrogante, y es que parte de lo que conmemoramos y también celebramos en esta fecha es eso. Es el legado que heredamos de las mujeres indígenas que vivieron antes que nosotras, y que trazaron un camino de luchas incesantes hacia la adquisición de derechos y oportunidades, que hoy nos hacen tener la libertad de poder plantearnos cual es el rol que como mujeres mapuche queremos tener en la actualidad.

Luchas que dieron mujeres como la Aymara Bartolina Sisa, mujer quechua por la que se conmemora este día, pero también luchas que dieron nuestras abuelas, bisabuelas, tatarabuelas incluso. Mujeres indígenas por la cuales hoy tenemos la libertad de tener una voz y decidir sobre gran parte de los asuntos de nuestra propia vida. Es gracias a ellas y sus logros que hoy podemos seguir avanzando en la adquisición de más derechos que garanticen nuestra dignidad, y que podamos continuar construyendo un futuro donde nuestras realidades sean visibles, comprendidas y valoradas.

Creo que por esto parte de nuestro rol hoy como mujeres indígenas mapuche es no olvidar. No olvidar a aquellas mujeres weichafe que defendieron aguerridas nuestro territorio, a aquellas que lucharon por preservar nuestra cultura, a las que hoy en día siguen luchando por proteger nuestro wallmapu. No olvidar a nuestras abuelas, madres, tías, y a todas aquellas mujeres que nos ayudaron a sentirnos orgullosas de decir que somos mujeres mapuche. Creo que parte del rol más vital que tuvieron nuestras antepasadas fue el ayudarnos a construir nuestra identidad en base a autoestima y orgullo de pertenecer a un pueblo tan noble como lo es el mapuche.

Gracias a estas mujeres pudimos sobrellevar la invisibilización y la discriminación que sufrimos como pueblo, valorando la fortaleza de nuestras raíces y siguiendo el gran ejemplo que con su perseverancia nos entregaban.  Mujeres las cuales jamás se dejaron derrotar, y que siguieron trazando en el tiempo un camino más justo para las generaciones siguientes. Y es por esta razón que debemos que hacer lo mismo por las niñas y jóvenes mapuche que vienen después de nosotras. Nuestro rol hoy en día es heredarles un mundo donde ellas no se vean expuestas a la discriminación, al machismo, a la violencia e incluso a la crisis climática. Es continuar trazando caminos que aseguren libertad a nuestro pueblo.

Parte de nuestro rol como mujeres mapuche es justamente continuar el legado de nuestras antepasadas en la lucha contra las injusticias. Debemos construir un Chile donde los pueblos originarios sean reconocidos constitucionalmente y se busque reparar los daños que tanto han lastimado nuestra dignidad. Tenemos que velar porque ninguna acción que denigre a nuestro género sea amparada en la vergonzosa excusa de que es parte de nuestra cultura. Porque justamente nuestra cultura se basa en premisas como el “küme mogen” que es la forma de vivir bien, en equilibrio, respetando la dualidad ancestral que veneraba nuestro pueblo. Dualidad que implica respeto y condiciones de igualdad entre todos los mapuche, y que jamás permitiría desigualdades o hechos de violencia entre géneros.

Como mujeres mapuche tenemos el deber de proteger nuestra Ñukemapu o madre tierra, porque no podemos pensar en un futuro para nuestras futuras generaciones si al mismo tiempo con nuestras acciones y formas de desarrollo estamos destruyéndolo. Tenemos la importante labor de preservar nuestra cultura en el tiempo. Cultura que respeta y se relaciona en equilibrio con el medio ambiente, que posee formas de relacionarnos socialmente como iguales, que en contenido tiene mucho aportar al desarrollo de nuestra sociedad y que como portadoras de este conocimiento tenemos la labor de transmitirlo.

Continuemos trazando caminos de libertad y derechos, sigamos participando y luchando por construir y concretar las añoranzas de nuestras antepasadas. Estoy convencida de que nosotras las mujeres mapuche generaremos cambios, porque nuestra historia demuestra que ya los hemos realizado y que sin duda debemos continuar en esa dirección. A pesar de tener que sortear barreras más altas que el resto de las mujeres no hemos desistido. Y justamente es lo que tenemos que transmitir a nuestras nuevas generaciones, que los cambios los haremos tal como lo hicieron nuestras antepasadas, sin rendirnos y en unidad.

 

 

 

“Este proyecto es financiado a través del Fondo de Fomento de Medios de Comunicación Social del Gobierno de Chile y del Consejo Regional de La Araucanía”